Debemos reconocer que la famosa canción de nuestro querido
Horacio Guarany (que fue homenajeado en nuestro blog en una nota titulada DE
ALTO VERDE A LUJAN) es del gran poeta Cubano JOSE ANGEL BUESA de quien dejamos
a continuación una breve biografía.
Ricardo Juan Sabugo
José
Ángel Buesa (Cienfuegos, Cuba 1910-Santo Domingo, República Dominicana,
1982) fue un poeta romántico con un claro tono de melancolía a través de toda
su obra poética, que es primordialmente elegíaca. Se le ha llamado el
"poeta enamorado". Ha sido considerado como el más popular de los
poetas en la Cuba de su época. Su popularidad se debía en gran parte a la
claridad y profunda sensibilidad de su obra. Muchos de sus poemas han sido
traducidos al inglés, portugués, ruso, polaco, japonés y chino. Otros muchos
han sido musicalizados o recitados en unos 40 discos de larga duración. Fue
también novelista y escritor de libretos para la radio (novelas radiofónicas) y
la televisión Cubanas, también fue director de célebres programas radiales en
las estaciones RHC-Cadena Azul y CMQ, ya inexistentes.
NOTA:
Wikipedia (extracto)
FOTO:
otrolunes.com
José Ángel Buesa
POEMA DE LA DESPEDIDA
Te digo adiós, y acaso te quiero todavía.
Quizá no he de olvidarte, pero te digo adiós.
No sé si me quisiste... No sé si te quería...
O tal vez nos quisimos demasiado los dos.
Este cariño triste, y apasionado, y loco,
me lo sembré en el alma para quererte a ti.
No sé si te amé mucho... no sé si te amé poco;
pero sí sé que nunca volveré a amar así.
Me queda tu sonrisa dormida en mi recuerdo,
y el corazón me dice que no te olvidaré;
pero, al quedarme solo, sabiendo que te pierdo,
tal vez empiezo a amarte como jamás te amé.
Te digo adiós, y acaso, con esta despedida,
mi más hermoso sueño muere dentro de mí...
Pero te digo adiós, para toda la vida,
aunque toda la vida siga pensando en ti.
Quizá no he de olvidarte, pero te digo adiós.
No sé si me quisiste... No sé si te quería...
O tal vez nos quisimos demasiado los dos.
Este cariño triste, y apasionado, y loco,
me lo sembré en el alma para quererte a ti.
No sé si te amé mucho... no sé si te amé poco;
pero sí sé que nunca volveré a amar así.
Me queda tu sonrisa dormida en mi recuerdo,
y el corazón me dice que no te olvidaré;
pero, al quedarme solo, sabiendo que te pierdo,
tal vez empiezo a amarte como jamás te amé.
Te digo adiós, y acaso, con esta despedida,
mi más hermoso sueño muere dentro de mí...
Pero te digo adiós, para toda la vida,
aunque toda la vida siga pensando en ti.